Ciudad de 15 minutos
¿Conocéis este término? (»ciudad del cuarto de hora»)
Es el nombre del proyecto de Carlos Moreno, director científico y catedrático de Emprendimiento, Territorio e innovación de la universidad Sorbona de París. Inspirado en otras investigaciones y aportes, como el de la periodista Jane Jacobs, quién argumentaba que la proximidad es la clave para hacer que las ciudades tengan más vida.
¿Imagináis vivir en una ciudad donde todos los servicios básicos como el trabajo, la sanidad, las tiendas, la cultura y el ocio estén a menos de 15 minutos de casa?
No necesitar del transporte público o del vehículo privado para realizar las actividades del día a día, que al final les resta unas 2-3 horas de media en las grandes ciudades.
¿Cómo es exactamente una «Ciudad de 15 minutos»?
Es una ciudad con barrios, donde puedes encontrar lo que necesitas a 15 minutos de tu hogar. La condición es moverte a pie o a bici. La propuesta nace dando respuesta al problema original del cambio climático, ofreciendo una disminución de los desplazamientos forzados en las ciudades actuales. De este modo se crea una accesibilidad a los servicios necesarios vivir sin tener ni siquiera que coger el transporte público. Es decir, crear microciudades autosuficientes dentro de la gran ciudad.
Se quiere romper el círculo vicioso de la gran metrópolis en la que se producen desplazamientos obligados de millones de personas desde muy temprano hasta final de la tarde. En la capital parisina, por ejemplo, la gente se apelotona a lo largo de esa franja del día en el transporte público (justo lo que se desaconseja en momentos como los que vivimos de pandemia).
Es fundamental por lo tanto la descentralización. Estamos acostumbrados a vivir en ciudades segmentadas: por un lado el trabajo, por otro el hogar, por otro el ocio y servicios… En el contexto en el que estamos se replantea esto como una visión positiva para implementar como nueva estructura de ciudad. Otro lado positivo que sacaríamos a este sistema es volver a retomar la proximidad entre ciudadanos. Esto es algo que se ha ido perdiendo conforme la ciudad ha ido creciendo ya que no se enlazan relaciones con los entornos, sino que los ciudadanos están de paso en las distintas áreas de la ciudad. Una especie de anonimato.
Es todo un desafío implementar esta idea, aunque no debería de ser complicado. Las ciudades deben de diseñarse por y para sus habitantes. Las condiciones de estas deben de adecuarse a las necesidades que tenemos. Puede sonar incluso un poco utópico la idea de la cercanía cuando hablamos de trabajo, la gran parte de las personas trabaja lejos de casa. Pero si hemos podido implementar el teletrabajo debido al Covid 19, ¿por qué no podría ser una solución permanente?
La realidad es que estamos viviendo en ciudades descompensadas urbanísticamente, donde hay barrios muy desarrollados de actividad mientras otros están apagados. La crisis llama al desempleo, el desempleo llama a la pobreza… Se quiere aprovechar que tras la pandemia, se creen modelos de negocio de cercanía. Se hablará de una nueva economía de proximidad. Está claro que en el futuro no viviremos de la misma manera. Todo se modifica y se transforma. Esta transformación no debe de verse como una inversión de dinero sino como una renovación de lo existente. Dar una nueva dirección a la localización de los usos, de esta manera estaremos apostando por la sostenibilidad y mejorar la calidad de vida de los habitantes.
fuente:
https://www.cosasdearquitectos.com/2020/08/ciudad-de-15-minutos/
En otras palabras, se trata de una vision localista donde todo este " a la mano". Suena muy bien de hecho. Esperemos que a futuro esta sea la politica imperante a nivel de infraestructura y urbanismo en la Nueva Venezuela 😎🙂